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© MAC Cosmetics
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Hoy quiero hablar de esta nueva máscara de pestañas que ha
lanzado MAC a principios de este verano y que he estado probando los últimos
días. Antes de empezar a describiros el producto, he de reconocer que nunca
encuentro una máscara de pestañas que me termine de gustar por completo y ésta
no va a ser la excepción, siempre les encuentro algún pero y las máscaras de
MAC no son el mejor producto de la marca, aunque sí que ha habido algún par de
ellas que me han gustado bastante.
Una de las cosas que, personalmente, busco en una máscara de
pestañas es su duración y siempre acabo recurriendo a máscaras waterproof, por
eso me decidí a probar ésta ya que, según la web, promete una duración de hasta
16 horas y, lo que es mejor, un fácil desmaquillado.
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© MAC Cosmetics |
Lo primero que llama la atención es su envase: ya no es el
típico envase negro característico de la marca, sino que en este caso es el
tubo azul marino y el capuchón de un azul turquesa metalizado; lo que la hace
fácilmente reconocible. Su segunda característica es su cepillo más fino que,
según indican en la descripción de la web, está diseñado para aportar
definición y volumen a las pestañas.
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© MAC Cosmetics. |
Se trata de una máscara bastante ligera, aún con varias
capas no las deja saturadas y apelmazadas, pero tampoco da un efecto
excesivamente dramático; lo que sí que me ha dado la sensación es que las
alarga sensiblemente y mantiene bastante bien la curvatura; al menos en mis
pestañas que de por si son relativamente largas y rizadas. Una de sus características más destacables es
la facilidad para desmaquillar: con un poco de agua tibia y frotando con
suavidad la máscara no se diluye, sino que se deshace en pequeñas virutas, con
lo cual no se emborrona y con una presión muy ligera consigues retirar todos
los residuos.
Esta característica de su formula es lo que lo hace resistente:
la máscara no se emborrona, con lo cual nos evitamos la ojera ennegrecida;
Además esto también la hace relativamente resistente a las lágrimas, es decir,
la máscara no se corre al llorar, pero hay que llevar cuidado de no frotarla
porque entonces acabaremos con todo el ojo lleno de virutas negras.
En resumen, es una máscara de pestañas que personalmente me
ha gustado porque ofrece una larga duración y un fácil desmaquillado; pero que
no me ha apasionado porque no ofrece un resultado tan dramático como me hubiera
gustado, aún así creo que es una buena máscara para maquillajes más naturales o
para usar con pestañas postizas. Aunque,
como todo en la vida, depende de gustos personales y, sobre todo, del tipo de
pestañas que cada uno tenga, por lo que recomiendo siempre acercarse a probar
el producto antes de adquirirlo.
Este producto sólo está disponible en color negro Endlessly
Black y cuesta 18€.